Sólo los muy veteranos saben como reinventarse a sí mismos, y además como hacerlo en la dirección más adecuada, o más sorprendente. Fate Fatal, el cerebro tras The Deep Eynde, lo demuestra con este enérgico y cañero "Bad Blood".
"Bad Blood" es un trabajo de The Deep Eynde editado en People Like You (Ref: Prison 139-2) en Mayo de 2007. Interpretado por Fate Fatal como cantante & Stress en la guitarra & Tino Franco en la guitarra & Hal Satan a la batería & Robert Graver como bajista desde Estados Unidos y navega entre los estilos Psychobilly & Punk Rock y tiene una duración de 41,24 minutos. Enlaces Relacionados:The Deep Eynde & People Like You Valoración: 7.25 sobre 10
De piedra me he quedado al oir este nuevo álbum de The Deep Eynde; aunque eso sí, debo confesar que la causa de mi estupefacción es atribuible sólo a mí y no a la banda. Soy yo el único culpable de haberles perdido la pista después de aquellos temas que publicaron en recopilatorios del sello alemán Apollyon, como el imprescindible "Death by Dawn II.The Avenger" o el "The New Face of Apollyon". Se me puede calificar como mínimo de ingenuo al pretender que la banda sonara como en aquel fantástico tema, 'Hoodoo', que los lanzó a la fama en el año 1995. Pero es que lo que hacen ahora difiere tanto de lo que hacían hace doce años que, aún entendiendo que me he perdido toda su evolución desde entonces hasta ahora y que eso me limita bastante a la hora de hablar de su música, es inevitable, por esa misma razón, experimentar una sacudida de sorpresa ante el sonido de The Deep Eynde.
Con la producción de, nada más y nada menos, William Faith ( Faith and the Muse ) y de su amigo Chad Blinman, el presente disco nos ofrece una serie de canciones en la que las que Fate Fatal, el cerebro tras la banda, admite haber incluido influencias de The Misfits, Ramones, The Damnedned o The Stooges para acabar creando una música a medio camino entre el punk rock y el psychobilly (disculpadme si no sitúo correctamente los géneros musicales ) con algún que otro tinte oscurillo. Para dar forma a este trabajo Fate Fatal ha contado con miembros de bandas como Rezurex o Pins and Needles, iconos de la escena psycho estadounidense, y se ha centrado en la creación de canciones que van directamente a las neuronas y que empujan a la pista de baile de manera prácticamente obligatoria.
El disco comienza con uno de los temas más rápidos, el excelente 'Kiss of Violence', rápido y frenético y que cuenta con un irresistible estribillo que te forzará a cantarlo a grito pelado sin que te des cuenta. A destacar los coros que lo adornan, presentes en muchos temas, y que no son sino un refuerzo para animar al oyente a que se lanze sin prejuicios a cantar. 'We don't care about you' es el single ( sí, sí, aún hay quien saca singles ), en una línea parecida al anterior, pero con un estribillo carente de la arrasadora fuerza del anterior. Aún así es una canción altamente adictiva. 'Date from Hell' cuenta también con una buena ración de esos coros que invitan al oyente a unirse a la juerga, pero se parece demasiado a lo ya oído.
La verdad es que con "Bad Blood" los muchachos de The Deep Eynde se han revelado como unos auténticos maestros a la hora de crear canciones peligrosamente pegadizas, de estribillos tan mortalmente adictivos como el de 'Casualty of Love' o el de 'Teenage Rejected', tema en el que una vez más los coros hacen un papel sobresaliente. La sorpresa viene con 'Divide the Day', un tema en el que, a pesar que la batería sigue manteniendo un ritmo similar a los anteriores, las guitarras son bastante menos punk y más góticas y Fate Fatal muestra todo el potencial de su excelente voz, haciendo que evoque aquellos lejanos días de mediados de los noventa. El estribillo, por supuesto, es de los que hacen época; sencillo, corto y contundente.
Con 'Lonely Wolves' volvemos a la ortodoxia punk rock, mantenida por 'The Calling'. En este último corte sin embargo podemos escuchar algún que otro rastro gótico, bastante más leve de todas formas que en 'Divide the Day'. Aún así es uno de los temas más disfrutables del álbum. 'Christfuck' contiene una de las letras más comprometidas de "Bad Blood"; un ataque directísimo al Dios cristiano y a las atrocidades cometidas en su nombre. La canción está dedicada a la familia india americana de Fate Fatal, que "todavía no tiene voz"; compromiso y contundencia para un corte que no dudo en recomendar. Tampoco dudo en recomendar 'Under the Knife', la canción que más me recuerda a la época en la que yo conocí a esta banda; un caramelito envenado que se desliza sinuosamente por los oídos, provocando una indefinible sensación de inquietud... Los tres últimos temas, 'Sik of You', 'Song for sinners' y 'Zombie Kids', vuelven a los sonidos punk rock que presiden buena parte del disco, muy en particular 'Zombie Kids'. Prueba a bailarlo en tu habitación; a pesar del poco más de minuto y medio que dura te dejará agotado y sudoroso, pero feliz.
Los que hayáis ido siguiendo a la banda durante su carrera no os habrá costado ningún trabajo sumergiros en este "Bad Blood". A mí, muy poco acostumbrado a este tipo de sonidos a medio camino entre el punk, el psychobilly y demás estilos parecidos, cada vez me está resultando más fácil dejarme llevar por la refrescante energía que sacude los trece cortes de este trabajo. Incluso hay momentos, cada vez más frecuentes, en los que puedo disfrutar con el contagioso dinamismo de las canciones. Ya he conseguido que me importe muy poco que Fate Fatal sea una de las más brillantes y veteranas luminarias de la prolífica escena gótica californiana y que su pedigrí y su historia previa estuviesen demasiado presentes a la hora de afrontar la escucha de sus discos más recientes. Ahora puedo decir que me gusta este disco única y exclusivamente por sí mismo.