Tras cuatro discos y un par de maxi-singles, esta banda alemana de gothic rock ha decidido darse un respiro y ofrecer la obligada colección de grandes éxitos que toda banda que se precie debe tener.
"Years in Black" es un trabajo de Zeraphine editado en E-Wave (Ref: EWAVE062) en Junio 2007. Interpretado por Sven Friedrich como cantante y teclista & Norman Selbig en la guitarra & Manuel Senger en la guitarra & Marcellus Puhlemann a la batería & Michael Nepp como bajista desde Alemania y se centra en el estilo Gothic Rock y tiene una duración de 69,34 minutos. Enlaces Relacionados:Zeraphine & E-Wave Valoración: 7.75 sobre 10
Cuando allá por el año 2000 se puso fin a la existencia de una de las más grandes bandas de gothic rock de todos los tiempos, los increíbles Dreadful Shadows, hubo muchos que nos llevamos las manos a la cabeza. No nos lo podíamos creer, el grupo de Sven Friedrich se había disuelto, dejándonos a sus fans perdidos, sin rumbo y sin esperanza, presas fáciles de las pérfidas radiofórmulas o de las bandas de gothic metal. Afortunadamente para nosotros la mente inquieta de este berlinés estaba maquinando su vuelta a los escenarios, secundado por Norman Selbig, guitarrista de los extintos Dreadful Shadows.
El retorno de ambos, acompañados de otros tres nuevos guerreros, cristalizó en forma de nueva banda en el año 2002; Zeraphine era su nombre y "Kalte Sonne" su primera criatura en forma de disco. Desde entonces hasta ahora Sven y sus huestes nos han agasajado los oídos con cuatro trabajos de larga duración, un par de mini cds y, por último y más reciente, con este imprescindible recopilatorio de las que, para ellos y su discográfica, son sus mejores canciones. Bueno, en realidad eso de imprescindible es un decir, puesto que si eres un fan de Zeraphine y tienes todos sus discos este "Years in Black" no te va a aportar nada. No hay ningún tema nuevo ni ningún aliciente para el fan de toda la vida; sólo la comodidad de tener todos sus éxitos ( si es que estás de acuerdo con la selección realizada ) en un único cd.
Repasar los dieciocho temas de este disco supone recordar el alivio que pacificó las inquietudes de todos aquellos que dudábamos que Zeraphine no iba a estar a la altura de su banda precedente. Pues bien, no sólo la ha alcanzado, sino que ha sabido mantenerse con dignidad al lado de su memoria e incluso, en algún momento, la ha llegado a superar. El talento de Sven Friedrich ha permanecido intacto; su especial habilidad para escribir canciones directas, potentes y muy, muy pegadizas es la misma de siempre y se pone especialmente de manifiesto al repasar los temas de "Years in Black". Por si fuera poco, el mayor tesoro de Sven, su prodigiosa voz, sigue en el punto más alto de la excelencia. Desgarrada, profunda, potente y acariciadora, la garganta de este hombre es, sin duda, una de las más brillantes de todo el panorama gótico internacional.
Otra cosa que no plantea dudas es la especial magia musical que parece haberse posesionado de los miembros de Zeraphine, alzándoles hasta los primeros puestos del ránking de bandas de gothic rock. Las potentes guitarras dibujan melodías de altísima calidad, sofisticadas, guerreras y melancólicas a la vez. El bajo apuntala los temas de forma soberbia al tiempo que los teclados aportan el necesario toque de elegancia que pide la música de Zeraphine. La batería es también excelente, marcándose de vez en cuando algún que otro destacable ( y breve ) solo. Todos estos elementos, aún siendo brillantes por sí mismos, quedan a veces un tanto oscurecidos por el más brillante de todos, la inconmensurable voz de mr. Friedrich.
Siempre me cuesta mucho destacar canciones en los discos que me toca reseñar para Mentenebre, y este no es una excepción. Podría, tras pensármelo mucho, quedarme con la preciosa y emotiva melodía de 'Be My Rain', su potente y pegadizo estribillo y sus oportunos y ajustados arreglos electrónicos. También me quedo con 'Die Wirklichkeit' y con los recuerdos de Dreadful Shadows que esta canción me trae a la memoria. También debo mencionar la increíble 'Still', pegadiza y eficaz como pocas; es inevitable ponerse a bailar, o al menos a mover la cabeza, cuando la oyes. Otras canciones que no puedo dejar de citar es 'I never wanted to be like you' por su particular y potente energía e intensidad rock o 'Fang Mich', puro Zeraphine de estribillo bombástico y apasionado como pocos. Y es que, como ya he dicho en alguna otra parte de esta vuestra web, estos señores dominan como pocos el arte de crear estribillos que lleguen al corazón.
En fín, son muchas las canciones sobre las que me podría seguir extendiendo pero el espacio es limitado. Tan sólo quiero añadir una reflexión más y es que, tras haber escuchado este extenso repaso a los cuatro discos de Zeraphine, se me plantean varias preguntas, pero hay una de ellas que no deja de rondarme por la cabeza y de introducirse por entre las volutas de mi cerebro: Si Dreadful Shadows también sacaron cuatro discos ( y algún mini cd) y luego se disolvieron ¿ estaremos entonces ante el final de Zeraphine ? Espero sinceramente que no; a esta banda le queda todavía mucho camino por recorrer y muchos triunfos que conseguir.