Remake de Pathfinder, película de gran éxito fuera de nuestras fronteras en los años 90, nutriendo su guión de una antigua leyenda Nórdica.
"El guía del desfiladero" dirigida por Marcus Nispel con la distribución de 20th Century Fox & Hispano FoxFilm y presentada Julio de 2007. Interpretada por Karl Urban como Sombra & Russell Means como Pathfinder & Moon Bloodgood como Starfie & Jay Tavare como Blackwing desde Estados Unidos y transcurre entre los géneros Acción & Drama , tiene una duración de 99,00 minutos. Enlaces Relacionados:El guía del desfiladero & 20th Century Fox Valoración: 6 sobre 10
Vikingos... una figura legendaria no muy exprimida en el cine. No al menos en la época actual, teniendo en cuenta la larga estela de títulos que, poco a poco, se van dejando caer en rememoración de antiguas batallas épicas, momentos importantes de la historia, o personajes que plasmaron su nombre en los libros por su coraje, sangre derramada y cuerpos que dejaron tras de sí. Después del éxito de 300, era inevitable esperar otra película que alimentase sus bases y, quizá, expectativas, en los elementos principales que hicieron triunfar esta película. 20th Century Fox se puso a rascar en los anales de la Historia en busca de algo interesante y con suficiente fuerza para ser contado y exprimido. Así dieron con los Vikingos, aquel pueblo escandinavo famoso por su barbarie conquistadora. Pero ahí no quedo la cosa pues, para más INRI, El guía del desfiladero es un remake de una película noruega de 1987, dirigida por Nils Gaup y rodada íntegramente en Lapon. La cinta, aún sin llegar a nuestro país con mucha relevancia, fue todo un éxito e incluso ganó una nominación a los Oscars de 1987 en el apartado de mejor película de lengua extranjera. En esta ocasión, Marcus Nispel ha sido el encargado de la dirección del filme, del cual ya pudimos contemplar su trabajo en La matanza de Texas (2003) y Frankenstein (2004), entre otras. Del resto del reparto, destacar al principal protagonista, Karl Urban (Doom, El señor de los anillos, Las crónicas de Riddick, El mito de Bourne), en el papel del Ghost o Sombra, y la guapa Moon Bloodgood (actriz más especializada en series. La más reciente, y no estrenada en España, Day Break, y la película El amor es lo que tiene) en el papel de Starfire.
La historia, basada en una antigua leyenda de origen nórdico, nos sitúa en la inexplorada América del Norte del s.X, cuando un DrakkarVikingo encalla, producto de un naufragio, cerca de una población indígena. Toda la tripulación muere a excepción de un joven niño que, pese a ciertos rencores iniciales, es adoptado por la Tribu del Alba. Todo transcurre en perfecta armonía durante los siguientes quince años, donde el joven vikingo crece y aprende de las costumbres y formas de vida de su nueva familia. Aprende a cazar, relacionarse y también a luchar. Aunque para todos los efectos es uno más de ellos, su piel y el color de su pelo siempre delataran sus raíces, algo que el paso del tiempo no ha podido curar: aún sigue siendo el extraño cuyo alma lucha por encontrar su verdadera naturaleza. De hecho él es Sombra, así es como le llaman.
Justo en ese momento, cuando Sombra es rechazado para ser guía del desfiladero, una nueva horda de Vikingos regresa para hacer lo que mejor saben hacer: matar, devastar y violar pueblo tras pueblo hasta la aniquilación total. Sombra escucha a lo lejos los evidentes signos de la barbarie Vikinga sobre su poblado. Corre en su ayuda pero llega demasiado tarde. Encuentra todo destruido, muerte y desolación a su alrededor... incluso presencia el cruel asesinato de su propio padre. Pero ciertamente, después de todo, Sombra no es un nativo, en su sangre circulan los genes Vikingos, la destreza con la espada y su arma más poderosa, la inteligencia. En ese preciso momento comienza la persecución de Sombra por los profundos bosques hasta que, malherido, llega al siguiente poblado, con el consiguiente peligro para él mismo. Allí se encuentra con Starfire, la hija del chaman, que le acompañará en el resto de la aventura. Ahora el objetivo de ambos bandos es claro: conquista o supervivencia. La espada, la maza, y el hacha, contra palos y lanzas.
Como dije, viendo la película rápidamente se interpreta que lo que se quería conseguir era algo semejante a 300, o sea, una cinta puramente de acción, donde el plato fuerte fueran las batallas. Pero para nada encontrarás algo similar. La mayor parte de estas son a cámara lenta, pero, aún así, para nada espectaculares, ni siquiera están recreadas digitalmente. Lo único digital que veremos serán los chorros de sangre que brotan continuamente de los cuerpos y miembros cercenados. Igualmente, las batallas son bastante distintas, pues en la mayor parte de los casos son entre dos personas, o entre un grupo, pero no entre grandes batallones.
Haciendo más comparaciones para entender la película, me aventuraré a relacionarla con otro título que quizá llegue a sorprender, pero, sinceramente, vi mucho de Acorralado (Rambo I) en esta película, principalmente por dos factores. Uno, la persecución del cautivo Sombra por densos bosques, solo y casi desarmado, contra una ejército fuerte y enfurecido de Vikingos. Y otra, la forma de ir eliminando a sus enemigos uno a uno, aprovechando el camuflaje, la sorpresa, la fabricación de trampas y, sobre todo, el silencio y argucia.
Otra película, o serie de películas que rápidamente podemos relacionar, es Conan y similares. Aquellas viejas películas que empezaban siempre con una aldea siendo pasto de las llamas y aniquiladas por oscuros señores y lacayos enfundados con siniestras armaduras, cuyo único superviviente se convertiría en su futura pesadilla.
Y por último, tenemos Apocalypto, de Mel Gibson, donde también encontramos muchos puntos en común: la invasión de un pueblo nativo, persecuciones en la selva, venganza. Pero esta última esgrimía cierto toque de realidad, no como El guía del desfiladero, que se presenta todo mucho más comercial... Sea cual sea su influencia más directa, cierto es que aparentemente mana de muchas de ellas, lo cual confina una interesante mezcla.
Algo digno de mencionar seria el apartado estético de la película. Los filtros utilizados, tan oscuros y azules pálidos, hacen revivir con mayor esplendor la ambientación elegida. Existen algunos paisajes realmente cautivadores, impresionantes, así como un recorrido por múltiples y variados escenarios, como los bosques más agónicos, extensos lagos congelados, y abruptas montañas nevadas (referencia directa al titulo de la película).
Aunque los efectos especiales no son del todo llamativos, más que nada, porque no hay muchos, el final rodado en el desfiladero es bastante interesante. Las luchas deberían ser más precisas, dado que en ocasiones no te enteras de qué esta ocurriendo, pero existen infinidad de muertes sangrientas al más puro estilo Mortal Kombat.
Donde debieron invertir más dinero fue en los ropajes de los Vikingos, que estéticamente adquieren una presencia demoníacamente siniestra, embozados en robustas armaduras y macabros cascos, a veces, mezcla de las bestias del Señor de los anillos, y otras, más cerca del ejército de Thulsa Doom.
Interesante también la banda sonora, que lejos de ser una obra de arte, cumple perfectamente su función. En ésta más que en otras películas, esa ambientación orquestal queda de lujo con la época que refleja y que muchos de nosotros sabremos disfrutar.
En el fondo, El guía del desfiladero es lo que es... una película de acción sin mayor concesión. Poca más trama que la violencia y la supervivencia, pocos diálogos, o diálogos poco profundos, pero de ser sincero, tampoco creo que unos indígenas de aquel entonces tuvieran mucho que decirse mientras cientos de hachas estuvieran deseando saborear sus cabelleras. Entretenida... no creo recordar ningún momento que deseara que terminase por el aburrimiento, pero en el fondo, tampoco nada del otro mundo, sobre todo, porque como dije, siendo una película de acción, y teniendo en cuenta que eso es lo que quieres ver principalmente, sus escenas dejan mucho que desear, pues, por los medios entrevistos, podría dar más de sí... también, y a modo personal, he de confesar que películas como 300 han dejado el listón muy alto.
