La más voluptuosa de las aspirantes femeninas a ocupar el disputado trono del metal gótico está de vuelta con un nuevo trabajo potente, avasallador y masivo, como ella misma.
"Queen of Light" es un trabajo de Imperia editado en Massacre Records (Ref: MASSCD543) en Abril de 2007. Interpretado por Helena Iren Michaelsen como cantante & John Stam a la guitarra & Gerry Verstreken en el bajo & Jan Yrlund como guitarrista & Steve Wolz a la batería & Audun Gronnestad como teclista y guitarrista desde Noruega & Finlandia & Alemania & Belgica & Holanda y se centra en el estilo Gothic Metal y tiene una duración de 68,35 minutos. Enlaces Relacionados:Imperia & Massacre Records Valoración: 8 sobre 10
El ya lejano debut de esta banda tuvo lugar en aquel mítico tributo a Dead Can Dance, editado en 2004 por el sello griego Black Lotus. En ese más que interesante disco destacaba la versión que Imperia realizaba de 'The Lotus Eaters', en la que se nos presentaba a un grupo abrumadoramente potente, demoledor y brutal, que mezclaba elementos metaleros, operísticos, góticos y orientales. Al frente de semejante mixtura se encontraba una voz capaz de alcanzar tonos increíblemente agudos y de descender a los abismos más oscuros y siniestros; se trataba de Helena Iren Michaelsen, antigua integrante de la banda de gothic metalTrail of Tears.
Tras este sonado debut vino su primer larga duración ese mismo 2004, "The Ancient Dance of Qetesh". Un año después la tremenda Helena sacó a la luz su proyecto Angel, una aventura musical menos metalera que Imperia y algo más accesible para todos los públicos. A pesar de eso su disco "A woman's diary-Chapter I" recibió excelentes críticas por parte de los medios más cercanos al metal. Pero como a esta dama no le gusta ver como le crece la hierba bajo los pies casi en seguida se embarcó en dos proyectos paralelos, la concepción y nacimiento de su hija y la concepción y nacimiento de este "Queen of Light", un excelente disco de gothic metal bombástico, cañero ( para lo que es el género ) y mucho más enraizado en el metal que otras bandas del estilo.
Esta obra comienza con los temas más potentes y más cercanos al metal clásico. 'Mirror', 'Fly Like the Wind', 'Raped by Devil' y 'Braveheart' son cuatro piezas rápidas, enérgicas, tremendamente barrocas en su concepción y su desarrollo, y al mismo tiempo muy metaleras. Melodías épicas, teclados grandiosamente grandilocuentes, cambios de ritmo constantes, violines, algún que otro aderezo oriental, unas guitarras muy fuertes y una batería a veces realmente rápida son el perfecto acompañamiento a las apabullantes exhibiciones vocales de Helena. En medio de ellas hay un corte algo más suave, 'Broken Wings', con un hermoso comienzo de piano y voz y un desarrollo de medio tiempo desgarrado y lleno de pasión.
Si tuviera que quedarme con algún tema sería probablemente con 'Facing Reality' y su preciosa y envolvente atmósfera. Más gótica que cualquiera de las precedentes, esta canción auna a la perfección contundencia, melodía y belleza y nos presenta a una Helena realmente seductora, dulce y sobria, que abandona por un momento su lado más guerrero y se deja caer por los insondables abismos de la pasión y el sentimiento envuelta en un delicado halo de tragedia y desgarro. Muy distinta pero igualmente destacada es 'Norway', un canto a su país natal a base de melodías de sabor tradicional mezcladas con potentísimas descargas metaleras y con numerosos aderezos góticos y orquestales. Destaca aquí el juego de voces; por un lado la de Helena, que lleva constantemente un dificilísimo tono agudo, y por otro una voz masculina a medio camino del black y el death metal.
Merece comentario también 'Abyssum' y su bellísimo comienzo de coros, piano y una voz a alturas casi celestiales, dando una nueva prueba de su alucinante versatilidad. Con la introducción de las guitarras y los arreglos de corte orquestal nos encontramos ante lo que parece ser una sinfonía gótico-metálica perfectamente ubicable en los últimos discos de Lacrimosa. 'The Birth of...' es una delicatessen exclusivamente a base de teclados, coros y samples. Tenebrosa y amenazadora a la vez que etérea y delicada, es en realidad el prólogo de 'Queen of Light', otro de esos cortes cañeros en los que Helena aprovecha para dar un recital de sus innegables cualidades vocales y en el que las guitarras se hacen notar con unas melodías realmente infartantes.
'Fata Morgana' se sumerge de lleno en ambientes épicos cuasi cinematográficos. Su destacado trabajo de percusión y sus melodías orientales la podrían haber hecho aparecer sin problemas en la banda sonora de cualquiera de las dos partes de 'La Momia'. Con 'The Calling' es donde Helena echa el resto con la voz ofreciéndonos varios cambios de tono y registro en una sola frase, del chillón más agudo al bajo más siniestro tal y como solía hacer Nina Hagen. Para rebajar el hervor que sentimos en nuestras venas tenemos la pieza que cierra "Queen of Light", el hermosísimo y fúnebre réquiem titulado 'Missing You'. Unos espectrales y sutiles coros de la propia cantante se unen a la trágica melodia mientras que la voz susurra una despedida con tristeza infinita. Esta canción me la apunto para que suene en mi funeral.
Como conclusión diría que el disco es más que excelente. Apenas hay respiro; no hay bajones en su intensidad y en su potencia, pues tan intensos y potentes son los temas rápidos como los relajados. No es para nada aburrido sino todo lo contrario, os hará pasar un buen rato. Además, y como principal aliciente, está la voz, ese prodigioso instrumento con el que la naturaleza ha dotado a Helena Iren Michaelsen y que le ha permitido ponerse a la altura, e incluso superar, a sus compañeras de estilo. Todas son capaces de alcanzar bellos registros operísticos y de provocar tristes y hermosas sensaciones en el oyente pero ninguna, o muy pocas, alcanzan la deslumbrante variedad de registros y tonalidades que domina con maestría esta auténtica diosa que es Helena.
Tras este sonado debut vino su primer larga duración ese mismo 
Merece comentario también '