Andrea Haugen, quien se dio a conocer por su proyecto Neofolk Hagalaz Runedance se ha pasado a un espacio más terrenal. Ahora presenta su segundo trabajo como Nebelhexe dedicado a explorar el suculento campo de la sensualidad.
"Essensual" es un trabajo de Nebelhexe editado en Candlelight (Ref: CANDLE159CD) en Octubre de 2006. Interpretado por Andrea Haugen como compositora y vocalista desde Noruega y se centra en el estilo Darkwave y tiene una duración de 41,19 minutos. Enlaces Relacionados:Nebelhexe & Candlelight Valoración: 7.5 sobre 10
He de reconocer mi fascinación por esta noruega, cuyo aura, carisma y belleza me vienen cautivando desde que la pude contemplar en directo en el Wave Gotik Treffen de Leipzig y en una gira suya por Alemania hace ya algunos años con su anterior proyecto Hagalaz´ Runedance.
Andrea “Nebel” Haugen comenzó su trayectoria musical allá en 1994 colaborando con Aghast en el álbum "Hexerei Im Zwielicht Der Finsternis", en el que colaboró con su actual nombre de guerra Nebelhexe. Poco después vino su etapa Neofolk con Hagalaz´ Runedance que comprendería desde 1996 hasta 2002 con la publicación de tres álbumes. En este período también publicaría su primer libro "The Ancient Fires of Midgard", en el que nos aproxima a la religión ancestral germánica y nos enseña la forma de utilizar e interpretar las runas con fines mágicos.
Después de esta etapa, que para mi es la más interesante de su trayectoria, decide emprender un nuevo camino musical. La inclusión de guitarras eléctricas, cajas de ritmos y sintetizadores imbrican su proyecto en un estilo que no llega a ser Gothic Rock, y que yo me atrevo a calificarlo más bien como Darkwave, sobre todo por la producción, un tanto barroca. Así ve la luz "Laguz, Within The Lake" en 2004, bajo el nombre de Nebelhexe.
De este modo llega en este 2006 su segundo trabajo, "Essensual", donde Andrea pretende realizar un viaje a través de las exquisitas sendas de la sensualidad. El trabajo es muy variado y rico en matices aunque yo creo que el tema de la sensualidad no queda del todo patente. Con lo que es Andrea Haugen podría haberle sacado mucho más partido a este concepto.
Entramos de lleno en el análisis musical de esta obra. Primero quiero referirme a algunas secuelas que quedan de su etapa Neofolk. Así nos encontramos un par de temas con estas reminiscencias. Primero 'Underworld', con percusiones étnicas y una interpretación vocal que nos recuerda mucho a Hagalaz. No obstante hay una guitarra y un sinte que actualizan el tema. En esta misma línea con timbales y recitados vocativos está 'Living Thrash' que podría pasar perfectamente por un tema Neofolk.
Ahora entramos con el Darkwave que planea sobre la mayoría de los temas, con un creciente protagonismo de las guitarras y las bases. Así yo destacaría 'The Wish', uno de las más contundentes y carismáticos. Muy similar en cuanto a estructura es 'Invisible Entity', con una guitarra dura que casi roza el Gothic Rock. Una de las mejores, sobre todo por la interpretación vocal, es 'Their Dead Poetry', completando la terna de las canciones más potentes del CD.
Luego hay también coqueteos con el Trip Hop en 'Ezule’s Charm', que es la canción mas sensual de todo el trabajo (Así tenían que haber sido todas). Aquí es todo electrónica acompañando a la voz de Andrea que explota con acierto sus encantos a la hora de cantar. También muy sensual es 'Dreams of Little Girls', gracias principalmente a su rítmica, y aderezado de una componente orientalizante a cargo de unos violines.
Por último quiero mencionar la versión de The Cure, 'The Figurehead', que todavía no acabo de comprender qué hace dentro de un CD dedicado a la sensualidad. Es una versión bastante canónica, con la misma percusión, bajo y guitarra que la original y que sólo se diferencia de ella por algunos arreglos casi invisibles y el doblado vocal que hace Andrea para la canción. Poca imaginación a la hora de afrontar la versión.
Así que la vuelta por el mundo de la sensualidad ha resultado no demasiado convincente, aunque si vemos el artwork ese si que es sensual… Una pena pues Andrea Haugen podía haber sacado mucho más charm del que ella posee para haberlo surtido como un perfume a lo largo de todas las canciones. Así que sensualidad un poco light. No obstante se trata de un trabajo correcto, aunque algo apartado de su concepto generador.
Después de esta etapa, que para mi es la más interesante de su trayectoria, decide emprender un nuevo camino musical. La inclusión de guitarras eléctricas, cajas de ritmos y sintetizadores imbrican su proyecto en un estilo que no llega a ser 