Der Blaue Reiter regresan a la arena musical cinco años después de la salida de su anterior disco con el que seguramente sea su mejor trabajo hasta la fecha, el más oscuro, el más potente y a la vez el más hermoso y envolvente.
"Le paradis funèbre II. L´adieu du silence" es un trabajo de Der Blaue Reiter editado en Neuropa Records (Ref: NRP 50) en Septiembre de 2014. Interpretado por Sathorys Elenorth como cantante,pianista,percusionista y programador & Lady Nott a las voces,el violín y la percusión & David García como percusionista en directo desde España y navega entre los estilos Martial & Dark Ambient & Neoclassical y tiene una duración de 57 minutos. Enlaces Relacionados:Der Blaue Reiter & Neuropa Records Valoración: 9.75 sobre 10
Si alguien me preguntara cuales son las reseñas que más trabajo me cuesta escribir sin duda que le contestaría que son aquellas que corresponden a los discos que más me gustan o a los artistas cuya trayectoría despierta mi mayor admiración. Y es que me resulta enormemente difícil en ambos casos encontrar las palabras justas para explicar con claridad lo que quiero decir y para tratar de convencer al lector de que estamos ante un trabajo y un artista no solo que merece la pena sino que además es absolutamente imprescindible. Y no digo nada cuando, como es el caso de Der Blaue Reiter o de cualquier otro de los muchos proyectos que llevan Sathorys Elenorthy Lady Nott, se unen tanto la admiración por su trayectoria, siempre ascendente, como el pasmo ante el que me atrevo a afirmar que es un auténtico DISCAZO, así, con mayúsculas.
Lo que tenemos aquí es ya el cuarto disco oficial de este proyecto catalán que aúna como muy pocos la música marcial y los ambientes más desolados y oscuros, aderezándolos con deliciosos toques de elegancia neoclásica. Las percusiones contundentes y solemnes se entremezclan con fondos a veces aterradores, a veces gélidos, mientras el piano y, sobre todo, el maravilloso violín de Lady Nott, perfuman el atmósfera de una deliciosa melancolía que suaviza los opresivos ambientes creados por las canciones. Las voces intervienen poco, pero cuando lo hacen se integran perfectamente en la música, contribuyendo notablemente a crear el efecto final que esta persigue. Es precisamente en las voces donde se halla uno de los puntos más destacables de este disco; a las de Sathorys Elenorth y Lady Nott se unen las de algunas invitadas ilustres, como la de Daniela Bedeski ( Camerata Mediolanense, RosaRubea ) en el tema cinco, Cecilia Bjärgö( Arcana, Sophia) en el tema siete o Alina ( Lamia Vox) en el tema tres.
Todos y cada uno de los cortes contenidos en este maravilloso trabajo son recomendables, empezando por su gloriosa apertura, una versión corregida y aumentada de la canción del mismo nombre que abría el primer disco oficial deDer Blaue Reiter y en la que se resume a la perfección lo que es el sonido propio de este proyecto musical; atmósferas de una belleza embriagadoramente gélida, que transpiran una sobrecogedora sensación de magnificencia y majestuosidad, reforzada por unas percusiones solemnes, firmes y contundentes, además de por unas magníficas orquestaciones que recuerdan a la más épica de las bandas sonoras posible. Y, por supuesto, como colofón el violín, ese instrumento capaz como pocos de transmitir sensaciones que conmueven el alma.
Como digo, temazos son todos los aquí contenidos, pero también me han gustado mucho ‘Anthem for doomed youth’, que me recuerda tanto a la primera, y para mi mejor, etapa de Ordo Equilibriocuando aún se llamaban así o ‘Il tempo è la disperazione’, con una intervención espectacular de la mencionada Daniela Bedeski y unos ambientes entre lo evocador, lo marcial y lo oscuro. ‘The beginning of the end’ empieza de forma magistral, con el sampleo de una antigua canción que bien podría haber sonado en el bar del hotel Overlook y sigue con unos obsesivos loops de corte industrial para pronto aplastarlos bajo unas melodías de una belleza deslumbrante y épica y unas voces más en la línea de Ordo Equilibrio que nunca. En pocos temas de este disco se alcanzan unos niveles de emotividad como los que se consiguen en este…
Música sacra de una hermosura sin igual sirve de prólogo a ‘Under deadly rain’, otro temazo en el que las protagonistas son la guitarra acústica, la percusión más marcial que nunca y la voz de Cecilia Bjärgö, que en este tipo de canciones se mueve como pez en el agua. ‘Requiem for a dying world’ combina maravillosamente coros gregorianos, piano y ese increíble violin del que Lady Nottarranca notas tan conmovedoras… En fín, creedme cuando os digo que todas y cada una de las canciones de este disco son piezas magistrales. Y esto no hace sino confirmar la trayectoria ascendente de los dos genios que forman Der Blaue Reiter, que con cada uno de sus discos, sea bajo la encarnación que sea, nos dejan sin palabras y nos sacuden el alma. Así ocurrió, asi ocurre y estoy convencido que así seguirá ocurriendo.