Proyecto madrileño que combina de forma única el metal más oscuras con música étnica de raigambre oriental. Una alquimia que sólo Vihmana es capaz de conseguir.
"Un Ocaso Trascendente" es un trabajo de Vihmana editado en Nooirax Producciones en 2013. Interpretado por Nacho Hernández como compositor, vocalista, guitarrista y teclista & Luis Horacio como percusionista & Pablo Hünerberg como percusionista & Natalia Estrada como flautista & Clara Corral como flautista & Irene Morell como flautista & Javier Guarino a las guitarras & Fátima Ruiz como vocalista & Noelia Alarcón como vocalista desde España y navega entre los estilos Black Metal & Ethnic y tiene una duración de 38 minutos. Enlaces Relacionados:Vihmana & Nooirax Producciones Valoración: 7 sobre 10
Confieso mi perplejidad al enfrentarme a la escucha de “Un Ocaso Trascendente”. Allí me encuentro con la conjunción de estilos totalmente diferentes en una suerte de fusión difícil de comprender si te hablan de ellas: la música oriental conjugada con el metal. Este eclecticismo es el santo y seña de Vihmana, el proyecto tras el cual se halla Nacho Hernández.
Se que este no es a priori mi terreno, pero como buen escuchante y crítico que ha tocado muchos palos desde 1995 me atrevo con esta reseña. La verdad es que he disfrutado este disco por sus tempos, por su sonoridad, por su variedad de registros que te van llevando, transportando, de unos a otros territorios sonoros haciendo volar tu imaginación. Esta es una virtud difícil de conseguir pero que Vihmana ha logrado.
Los instrumentos musicales se adecúan, como no, a este devenir musical. La guitarra española y la flauta travesera se ponen de parte del sonido étnico mientras que las percusiones, el bajo y la potente guitarra caen del lado del metal. También hay que mencionar que la letra está escrita íntegramente en castellano, algo que no es habitual ni en el metal ni en la música étnica, lo que hace todavía más especial este proyecto.
En lo que a las canciones se refiere, gusto más deaquellas en la que la parte étnica lleva un mayor peso. Así, dos temas instrumentales como ‘Un Ocaso’ y ‘Alminar’ se recrean en arabescos musicales deliciosamente compuestos. Hay un tema que casi podríamos incluirlo dentro de la corriente heavenly voices. Es el que cierra el álbum y lleva por título ‘Amatevi’, calmo, melódico, con alternancia de voces femeninas y masculinas, podría pasar por un tema del catálogo de Prikosnovenie.
Si pasamos a los temas donde está presente el metal, me llama la atención especialmente ‘Monzón’, también instrumental y un tema donde se hace evidente la fusión oriental-metal, un tema tranquilo donde irrumpen violentamente las potentes guitarras. Pasa algo parecido con ‘Al Alba Inhumana’ pero aquí si que aparece un metal de lo más oscuro, con voces guturales y guitarras vertiginosas propias del black. Por último cito ‘Hasta Nuestra Completa Aniquilación’, tema de un metal pausado con vocalización cavernosa y sobre el cual la flauta parece atenuar la brumosa oscuridad de la voz.
De lo que no cabe ninguna duda es de que Vihmana me ha sorprendido. Si eres un escuchante audaz tal vez te puedas dejar seducir por la inquietante y singular mutación sonora que ha engendrado Vihmana. De lo que sí estoy seguro es de que no te dejará indiferente.
Se que este no es a priori mi terreno, pero como buen escuchante y crítico que ha tocado muchos palos desde 1995 me atrevo con esta reseña. La verdad es que he disfrutado este disco por sus tempos, por su sonoridad, por su variedad de registros que te van llevando, transportando, de unos a otros territorios sonoros haciendo volar tu imaginación. Esta es una virtud difícil de conseguir pero que 