La leyenda del industrial presenta en Madrid su faceta rockera más psicodélica
El jueves 4 de noviembre tuvo lugar en la sala Moby Dick de Madrid uno de los eventos más remarcables de este año 2008. Psychic TV deleitaba a sus fans y curiosos con sus últimos temas, concebidos bajo una renovada asimilación del rock roll americano de finales de los sesenta y principios de los setenta, claramente influenciados por bandas como New York Dolls, o la semilla del punk, The Stooges. A esta base se le ha indexado una gran cantidad de efectos y distorsiones sobre las que se apoya la controvertida y viciosa voz de Genesis P-Orridge, que con su actitud hostil y presencia desmejorada aporta el glamour necesario para hacer de Psychic TV el grupo más controvertido de la historia.
Estaba claro, el mero hecho de ver a varios metros de distancia a un mito del género industrial como es Genesis P-Orridge, era incentivo suficiente como para excusar toda objeción que se me pudiera pasar por la cabeza para no asistir a su concierto.
Para quien no lo sepa, estamos hablando de un artista sin precedentes. Fue el creador de la música industrial en 1976, cuando militaba en Throbbing Gristle junto a Cosey Fanni Tutti, Chris Carter y Peter Christopherson. T.G era pura y absoluta provocación, una nueva forma de rebeldía ante el sistema establecido. Fueron coetáneos al estallido del punk rock en Inglaterra, factor que les ayudó en gran medida a promocionar su música con mayor libertad dentro de la conservadora sociedad inglesa de los años 70, paradójicamente dirigida por gobiernos laboristas que sumían al país en la decadencia. Throbbing Gristle atacaba de manera inteligente y muy sopesada la moral y la conducta del ser humano, ridiculizándolo a base de mostrar y ensalzar sus errores. Hacían uso de grabaciones de amenazas de muerte y torturas, rendían culto a los campos de concentración y a la magia de Aleister Crowley, y le fascinaban los asesinatos cometidos por niños y psicópatas. Fueron la indiscutible base de inspiración para proyectos que seguirían su senda y crearían estilo propio, como Whitehouse, SPK o Nurse With Wound, y gracias a ellos parte de la música de nuestros días es lo que es.
Psychic TV ha sufrido muchos cambios en sus filas durante su carrera. La banda se creó tras la descomposición de Throbbing Gristle. En 1981, Genesis y Chistopherson se ponen manos a la obra para dar a luz un nuevo proyecto mucho más centrado en la magia negra y el paganismo, gestando de nuevo un estilo propio, el conocido como post-industrial, que pocos años después derivaría en la subvertientedark folk.
A lo largo de su longeva trayectoria, la banda ha experimentado con toda clase de estilos, desde la música electrónica más enfermiza hasta temas muy abstractos e introspectivos difíciles de digerir.
A día de hoy el grupo se da a conocer con las siglas PTV3, diferenciando una nueva etapa en la que las guitarras, bajos y baterías se sincronizan de forma armoniosa, generando un rock alternativo muy apetecible e interesante.
El grupo subió al escenario sin necesidad de teloneros. Dos de sus componentes permanecieron enmascarados durante el primer tema. Genesis se presentó con una camiseta oficial de su propio grupo hecha jirones, dejando entrever sus artificiales pechos, y luciendo un corte de pelo a la altura del cuello de color rubio platino. Los temas que se presentaron fueron en su gran mayoría intensos. Genesis parecía cansado. No sabemos si esto era causa del concierto que tuvieron que ofrecer en Barcelona el día anterior, pero la verdad es que la estrella se mantuvo muy relajada durante todo el espectáculo, y esto se tradujo en la actitud del público, que por regla general tampoco se mostró muy vivo, más bien expectante de que Genesis hiciese alguna de las suyas.
Proliferaron entre tema y tema los efectos de grabaciones y sonidos inquietantes como enjambres de moscas, estos eran complementados con vídeos sobre los que el propio conjunto interactuaba.
Presentaron temas pertenecientes a sus lanzamientos “Hell Is Invisible…Heaven Is Her/e” y su último disco editado este año, “Mr. Alien Brain Vs. The Skinwalkers”. Puro rock roll psicodélico y metaindustrial que dejó perplejo al público.
‘The alien Brain’, ‘New York Story’ o ‘I Am Making A Mirror’ son canciones que encandilaron a los presentes y nos demostraron que a Genesis todavía le queda mucha mecha por quemar.
Tras una hora de espectáculo, la banda no se mostraba recompensada por los ánimos del respetable, por lo que solicitaron en respectivas ocasiones un poco más de energía y entusiasmo que finalmente el público supo otorgar.
La verdad es que a día de hoy, Genesis ha demostrado que puede hacer, y hace, lo que le viene en gana. A sus 58 años de edad continúa demostrando que es uno de los más carismáticos artistas del panorama independiente internacional, y sin duda alguna, toda una leyenda viva.
A lo largo de su longeva trayectoria, la banda ha experimentado con toda clase de estilos, desde la música electrónica más enfermiza hasta temas muy abstractos e introspectivos difíciles de digerir.
