Regreso de unas de las formaciones más experimentales e inclasificables del "poco" innovador panorama synthpop. De la mano del sello de moda, Out of Line, el dúo sueco publica su trabajo más comercial hasta la fecha.
"Celeste" es un trabajo de Auto-Auto editado en Out of Line (Ref: OUT 315) en Octubre de 2008. Interpretado por Johan Hellqvist como teclados, guitarra y coros & Erik Frankel como cantante, teclados, guitarra y bajo desde Suecia y navega entre los estilos Synthpop & Electro y tiene una duración de 44,15 minutos. Enlaces Relacionados:Auto-Auto & Auto-Auto MySpace & Out of Line Valoración: 8 sobre 10
En el año 2005Johan Hellqvist y Erik Frankel sorprendieron a critica y público con su primer trabajo "Sounds of a New Generation", un álbum de synthpop que combinaba elementos de EBM retro a lo Covenant, junto a otros de electro minimalista a lo Welle:Erdball, aderezados con unos, discretos pero reseñables, toques de electro industrial a lo NIN. Una mezcla curiosa , muy experimental, que en el fondo funcionaba por no dejar de sonar a pop electronico terriblemente adictivo y bailable.
La inteligente Out of Line en su incansable búsqueda de nuevos talentos ha visto en el dúo sueco un nuevo filón que engrose las arcas de la discográfica germana. Pero ojo, "Celeste" no es un producto supercomercial y apto para todos los públicos, aunque venga -y nos lo vendan- en tal envoltorio. Este trabajo no entra tan a la primera como lo puedan hacer algunas de las nuevas incorporaciones del sello, Marsheaux, And One, Ashbury Heights, Elegant Machinery... Y es que no hay un "hit" claro, un llenapistas absoluto, entre los trece cortes de un trabajo en el que la experimentación es tanto su principal cualidad como uno de sus defectos más destacados.
"Celeste" es experimental en su mezcla de sonidos. Melodías pop, de clara inspiración ochentera, construidas a base de samplers , loops propios de estilos más duros y contundentes que se mezclan con otros sonidos sacados del electro más minimalista y algunos del synthpop más comercial, acompañados de la voz de Erik, una voz moderna, que no intenta ser un mero clon de David Gahan y que se atreve con todo tipo de tonos, además de dotar al proyecto de un acertado y necesario aire "cool" .
'Do You Need Some Space?' y 'Toadboy', cortes que aspiran a triunfar en las pistas electrónicas más poperas, sorprenden por ser ambas canciones atípicas, realmente son un soplo de aire fresco a un estilo que destaca por su evidente y aterradora falta de ideas, pero en las que en el fondo no puedes dejar de preguntarte si ésta es realmente la evolución esperada, la nueva esperanza para el maltrecho synthpop.
Tal vez la culpa de tanta "incertidumbre estilistica" la tengan las melodías que, aunque resultonas, no dejan de sonar a típica melodía electropopera. Sólo hay que fijarse en los cortes 'Where the Buffalo Roam' o 'Empire Home', tan tipicos del estilo.
Mucho más interesantes son las canciones donde afloran los sentimientos más oscuros del dúo; el obvio 'Shadowlands' que se acerca al synthpop oscuro de unos Diorama pasados por una batidora de sonidos electro. 'I Like It', instrumental que puede presumir de ser el tema de mayor orientación electro y el que más posibilidades tiene de triunfar en las pistas de baile. 'Hastwerk' también es otro interesante experimento de aires oscuros, que apesta a Future Pop pero sin emplear ninguno de los elementos típicos de este estilo. Curioso.
Igual de curiosos son otros cortes, más indicados a la atenta escucha que para el baile, como son el intenso 'Mirror' o el más acelerado 'Arm Youself'. Realmente son temas en los que en cada escucha puedes apreciar un nuevo detalle que los hace aún más interesantes.
Personalmente me quedo con el inclasificable y divertidísimo 'Lazer Beam'. Tema imposible donde los haya, personal homenaje de la banda a Depeche Mode desde una perspectiva propia del maestro Falco.
Como ocurriera con las nuevas incorporaciones al sello germano, el álbum ha sido remezclado por John Fryer, quien parece haberse convertido en todo un experto en esto de los sonidos más propios de la década de los ochenta que de ésta.
"Celeste" es un trabajo ante todo singular, obligado para cualquier amente del synthpop con ganas de escuchar algo distinto con ganas de innovar pero que en el fondo no deja de ser más de lo mismo. Avisados estáis.
En el año 
