Desde la ciudad italiana de Venecia una nueva banda viene a plantar sus reales en esa imprecisa tierra de nadie que se sitúa entre las fronteras del gothic rock y del gothic metal.
"Silent cries for help" es un trabajo de Lachaise editado en MP & Records (Ref: MPRCD053) en Junio de 2008. Interpretado por Annalisa Monticelli como cantante & Valentina Degan a la guitarra & Nico Tonetto en los teclados & Alberto Bernardi como bajista & Stefano Gili a la batería desde Italia y navega entre los estilos Gothic Rock & Gothic Metal y tiene una duración de 51,30 minutos. Enlaces Relacionados:Lachaise & MP & Records Valoración: 8 sobre 10
Para cualquier persona que, como yo, sea amante de los cementerios y guste de pasear por ellos, seguro que el nombre de esta banda le trae agradables sensaciones, pues Lachaise ( Pére Lachaise, en realidad ) es como se denomina al cementerio de Paris donde están enterrados multitud de gentes vinculadas con el mundo del arte, como Jim Morrison, Edith Piaf o Chopin, entre otros. Además de por esto, el cementerio es famoso por la singular belleza de sus panteones y de las estatuas que adornan sus tumbas, objeto muchas de ellas de grandiosas portadas de discos que todos tenemos en la cabeza. Solamente ya por el buen gusto que les ha llevado a elegir este nombre, Lachaise se merecen una atención detallada.
El estilo musical que la banda ha decidido adoptar navega por una imprecisa y fantasmal corriente que circula entre los terrenos del gothic rock y del gothic metal, sin despreciar toques pop o incluso pequeños apuntes progresivos. No son la panacea que va a revolucionar el panorama musical, incluso en algunos momentos sus influencias de Evanescence o Lacuna Coil son harto evidentes, pero al menos lo que hacen lo hacen extraordinariamente bien y su resultado es enormemente satisfactorio, que es de lo que se trata. Y otra cosa, si los mismísimos Christian Death los han llevado de teloneros en su gira italiana será por algo ¿ no?
El disco comienza con una suave intro de guitarras, unida al primer tema en sí, ‘That’s enough’, una canción que nos muestra el gran potencial de esta banda italiana. Teclados envolventes, guitarras que fluyen como una corriente marina, batería magistral y arreglos elegantes, comandados todos ellos por una potente voz femenina, llena de pasión y fuerza a la vez que de elegancia. Pero no va a ser en este corte, sino en los tres siguientes, donde Lachaise ofrezca en todo su esplendor las virtudes que atesora…
‘Short life’ es un single perfecto, en el que los perennes teclados se enredan con unas guitarras magistrales a las que acaricia la voz, que pasa de la dulzura a la pasión con una facilidad pasmosa. A destacar el estribillo, enormemente pegadizo y adictivo, toda una bomba que te estará resonando en la cabeza durante días y días. ‘Maybe’ es más contundente y oscura, a pesar de su tierno comienzo ( este contraste entre comienzos dulces y desarrollos potentes es algo que puede apreciarse en más temas de este disco ), y cuenta con un estribillo fuerte y pleno de pasión. Su variedad de melodías e instrumentación ( atención a los redobles de percusión ) la hace enormemente deliciosa de escuchar. ‘A matter of’ comienza a capella, pero pronto los teclados, la batería y las guitarras, algo más suaves que antes, hacen su entrada para desembocar en el estribillo más emotivo de “Silent cries for help”, un estribillo que no puedo dejar de escuchar sin que se me ponga el vello de punta.
Después de esta magnífica tríada de pequeñas joyas es muy difícil mantener el nivel de interés y de calidad, pero Lachaise lo consigue con bastante dignidad y elegancia. Aunque en algunos momentos la sensación de haber escuchado ya este riff o esta melodía se hace demasiado patente, lo cierto es que la fuerza de las canciones aplasta dicha sensación casi enseguida, convirtiendo la escucha del disco en un muy agradable placer del que se pueden extraer cosas tan curiosas como ‘S.C.F.H’ ( siglas del título del disco ) en la que una voz masculina recita un poema con un inquietante y minimalista acompañamiento sonoro de fondo ( grandiosa la frase final; “end has just began” o “el fín acaba de empezar” ) , o como la preciosa primera parte de ‘It’s just a dream’, con sólo piano y voz desgranando una bellísima melodía.
Ahora que la banda ha cambiado de cantante ( Annalisa Monticelli abandonó Lachaise nada más terminar de grabar “Silent cries for help” ) se abren nuevos e interesantes horizontes ante la misma. De momento, se encuentran presentando en directo los temas del disco junto a Xenya, la nueva voz femenina de la banda. Esperemos que muy pronto se termine el acople con la nueva cantante y Lachaise nos ofrezcan un nuevo trabajo discográfico, pues este nos ha dejado un excelente sabor de boca y con ganas de más.
Para cualquier persona que, como yo, sea amante de los cementerios y guste de pasear por ellos, seguro que el nombre de esta banda le trae agradables sensaciones, pues 
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