Acababa de comenzar a correr la segunda mitad de la década de los ochenta cuando Magthea, uno de los miembros que junto al mítico Dirk Ivens militaban en la bien conocida formación EBM The Klinik, decidía escindirse de este proyecto belga para crear algo totalmente diferente, mucho más oscuro y ambiental que el grupo madre con el que se daría a conocer dentro del campo musical independiente.
Magthea bulló y rebulló esta idea durante años sin obtener demasiadas recompensas, hasta que finalmente, a comienzos de los noventa, conoció a lo que sería el otro pilar encargado de sustentar este templo musical:
Yasnaïa. Ella convencería a
Magthea de que la manera más eficaz para alcanzar las metas que uno se propone es ocupándose de ellas personalmente, por lo que juntos invertirán el escaso dinero con el que en aquellos primerizos años contaban para publicar en 1991 un mini CD que es, precisamente, el objeto que hoy nos atañe: “
The Ritual Should Be Kept Alive 1”.
La edición original únicamente contenía un corte en directo de poco más de veinte minutos registrado en
Bélgica durante el mismo año de su publicación. En ella se desvelan las claves del sonido de
Hybryds. Un estilo frío, denso, muy ambiental, cercano al
ritual, con cierto toque de musicalidad etnicista y pequeñas dosis de ritmo tribal. El sonido de
Hybryds fue muy bien acogido por la crítica, y en menos de un año ya estaban preparando lo que sería su primer álbum de larga duración “
Music For Rituals”, además de reeditar su primera y olvidada casete “
Mythical Music From The 21st Century”.
El sello polaco
Zoharum ha tenido la genial idea de relanzar esta joya olvidada, implementándola tres temas extra grabados en estudio ese mismo año. La duración de alguno de ellos, como es el caso del segundo, carente de título, supera en duración al corte estructural, además de reafirmar la calidad y el peculiar estilo de esta impresionante formación. Pocas bandas han sabido conjugar de manera tan acertada tantas influencias antagónicas. Su vistosidad acústica nos subsume en un universo de sueños y humo, el tiempo avanza despacio, portando un chuchillo bien afilado con el que ocasionalmente desgarra la conciencia.
Hybryds inaugura en “
The Ritual Should Be Kept Alive” un nuevo estilo de música ritual directamente emparentado con las
prácticas sexuales. Un paso más allá en el pensamiento que los primeros integrantes de
Psychic TV y
Thee Temple Ov Psychick Youth presentaron durante los albores de los años ochenta. Música envolvente que conforma su propio universo y se encierra en él. Paganismo bien condimentado que se escora ocasionalmente hacia el primer
industrial sin perder en ningún momento su esencia mágica.
“
The Ritual Should Be Kept Alive” ha sido presentado en formato digipak de seis paneles y limitado a quinientos ejemplares. Resulta una buena oportunidad para conseguir material infrecuente de esta banda de culto, o sencillamente descubrirlos si todavía no has tenido la oportunidad de escuchar nada. Aunque toda la carrera de
Hybryds es digna de aplauso, cierto es que tanto yo como otros muchos críticos sentimos cierta predilección por sus comienzos.