Los austríacos Illuminata nos presentan lo que debería ser considerado como una auténtica obra maestra en el campo del symphonic gothic metal, un disco absolutamente genial que no dudamos en recomendar efusivamente.
"A World So Cold" es un trabajo de Illuminata editado en Twilight Records (Ref: Twilight 784-2573) en 2011. Interpretado por Katarzyna como cantante & Joanna como cantante & Luki a la guitarra & Christoph en el bajo & Tom como batería & Sabrina en los teclados & Franz como batería invitado desde Austria y se centra en el estilo Gothic Metal y tiene una duración de 58 minutos. Enlaces Relacionados:Illuminata MySpace & Illuminata Facebook Valoración: 9.5 sobre 10
Hay veces en que un disco te entra por los ojos con tal fuerza que no puedes evitar comprarlo, completamente hechizado bajo el influjo de una envoltura singularmente atractiva o de una portada realmente fascinante, sin tener en cuenta en absoluto que es lo que te vas a encontrar cuando lo escuches. Precisamente eso fue lo que me ocurrió a mí con la portada de “A world so cold”, el segundo larga duración de Illuminata, una banda austríaca de symphonic gothic metal, que consiguen dejarme con la boca abierta cada vez que escucho su disco.
Y es que, superado el impacto de la preciosa portada del cd ( una estatua sangrante de mujer sentada sobre una fuente y con un desolado paisaje invernal de fondo ), cuando empecé a oír los primeros compases de este disco, iba notando como poco a poco se me iba erizando el vello. Aquí, en “A world so cold”, está todo lo que yo le pido a un disco de gothic metal: Fantásticas voces femeninas ( dos ), teclados omnipresentes y envolventes, creadores de maravillosas atmósferas, orquestaciones de infarto, guitarras y bajos poderosos y contundentes, pero sin pasarse, melodías variadas y sumamente complejas, arreglos fastuosos, ritmos a veces más metaleros, a veces más propios del gothic rock… en fin, que desde la primera escucha Illuminata consiguió hacerme caer rendido ante su arte.
La fascinante y embriagadora complejidad sonora de la banda envuelve el ambiente desde el minuto cero del disco, con una introducción a caballo entre lo orquestal y lo cinematográfico, una característica por cierto que utilizaran mucho a lo largo de todo “A world so cold”. A partir de aquí resulta sumamente arduo recomendar un tema u otro, pues todos, absolutamente todos, tienen méritos suficientes como para que se hable de ellos de forma individual. Las bellas melodías y los arreglos de ‘Cold hands warm hearts’ y el fabuloso comienzo y el brutal desarrollo de ‘End my agony’, uno de los cortes más metaleros del cd, rivalizan en calidad con la elegancia y la intensidad creciente de ‘Silent poet’ o el dinamismo de ‘The divine puppet’.
Y qué decir de ‘The world collector’, una canción que rezuma melancólica elegancia tanto si suenan de fondo o bien las guitarras o bien la batería y un fantástico piano, o incluso cuando intervienen las orquestaciones, tan atinadas y tan bien escogidas como siempre. Y qué decir también de ‘Dead warden dreamer’, contundente y cañera al tiempo que repleta de matices y de arreglos que la convierten en una verdadera joya del estilo. Y por supuesto, qué decir de ‘A frame of beauty’, más relajada que la anterior, casi cercana en algunos momentos al gothic rock, y tan bien arreglada como las demás.
Por su parte ‘Endless’ nos regala algunas de las más sobrecogedoras interpretaciones vocales de las dos cantantes de Illuminata, unidas en un dúo sensacional y envueltas en melodías maravillosas y subyugantes, capaces de emocionar y de poner el vello de punta. El penúltimo corte, ‘Lost in picturesque’, ofrece un notable contraste entre sus partes a medio tiempo, su rápido y adictivo estribillo, sus corales de infarto y sus arreglos orquestales. Y ya para cerrar esta obra de arte nos encontramos con ‘Metamorphobia II’, la única balada de todo el cd, a partir de cuya mitad van dejando introducir elementos orquestales que acaban por conformar un ambiente épico y majestuoso de gran intensidad.
Estamos pues, en mi opinión, ante uno de los más grandiosos discos de gothic metal que yo haya tenido la oportunidad de escuchar. Desde el año 2002, con la aparición del “At sixes and sevens” de Sirenia, no me había emocionado tanto con un disco de este estilo y, por supuesto, no había tenido la ocasión de recomendarlo con la efusividad, la pasión y la sinceridad con la que lo hago con este “A world so cold”.