Grabado en el Knitting Factory de New York, es un disco de versiones del venenoso sentimiento del amor vinculado trágicamente a la muerte. Una nueva conceptualización minimalista de la Diosa de la Oscuridad.
"Guilty, Guilty, Guilty" es un trabajo de Diamanda Galás editado en Caroline Records (Ref: CD135) en 2008. Interpretado por Diamanda Galás como Vocalista y Pianista desde Estados Unidos y navega entre los estilos Neoclassical & Avantgarde y tiene una duración de 42:00 minutos. Enlaces Relacionados:Diamanda Galás & Caroline Records Valoración: 7 sobre 10
Vigésimo primer álbum de esta veterana reina de la re-interpretación clásica, que de nuevo conceptualiza un álbum dentro de su particular sensibilidad.
Si su anterior álbum, "Defixiones. Will and Testament", estaba dedicado al genocidio armenio llevado a cabo por el estado turco, en este caso la Reina de la Oscuridad se ocupa de las tormentosas relaciones interiores entre “el amor y la muerte” en una re-interpretación artística de clásicos Soul, Blues y Country.
Esta activista por los derechos de los Seropositivos (ríete de Liz Taylor...) no deja indiferente a nadie.
Aun siendo uno un probable profano de los gustos clásicos y de las interpretaciones dramáticas, la experiencia de la escucha de cualquier tema de Diamanda Galás no puede dejar indiferente. Su fuerza, su poderosa voz, su maestría interpretativa y, sobre todo, su cosmovisión artística en la puesta en escena, etc, convierte a esta polémica virtuosa en una singular muestra de la oscuridad contemporánea moderna del reino de la música occidental.
En "Guilty, Guilty, Guilty" mantiene su conversación musical en voz y piano, como en anteriores trabajos, y en el que versiona a clásicos de la iconografía folk norteamericana.
Inicia su oscura andadura con una fabulosa presentación y tema de Overton Vertis Wright, '8 Men and 4 Women', en un surrealista Blues, que continuará con el tema de Danny Dill y Marijohn Wilkin también interpretado y más conocido por Johnny Cash, 'Long Black Veil', en el que la atmósfera ceremonial deja adivinar sus raíces folk norteamericanas, aquí más claras y menos cacofónicas, ya que está terriblemente profanado por la hija de Satanás.
'Down Low', pertenece a R. Kelly & The Isley Brothers, continuando con su tenebrosa interpretación blusera que desconcertará a sus amantes como fascinará a los profanos del rudo estilo norteamericano. Genial inicio en Acapella. Continua el concierto con el tema de Timi Yuro 'Interlude (Time)', muchísimo más suave en su entrada que en los anteriores, casi diría que íntimo, pero con una interpretación fabulosa, un tema más atmosférico que todo lo demás y, por tanto, más cercano a los gustos góticos de este santo lugar. Es mi tema recomendado. 'Autumn Leaves', tema de Joseph Kosma, con letra del poeta Jacques Prevert, es una extraña y personal interpretación que, como muchos de los lectores de Mentenebre desconocerán su fuente, no comprenderán la enrevesada forma creativa de esta re-interpretación de Diamanda Galás.
Para mí, el largo tema Blues 'O Death', de Ralph Stanley, es el que dibuja un escenario más poderoso, muy descriptivo de la locura Galas, con los pocos elementos musicales que dispone: Un piano y su voz. Suficiente para evocarnos lúgubres interpretaciones con su espectacular juego vocal, marca de la casa. El tema final es 'Heaven Have Mercy', de M. Philippe Gerard y Rick French, que realizó Edith Piaf, otra fasciante re-interpretación que nos conmoverá, por muy cerrados que seamos a esta forma de interpretar música.
Conclusión:
Un álbum dentro de la línea que lleva manifestando Diamanda Galás en los últimos cinco años, alejándose totalmente de la experimentación electrónica y de los temas más rockeros, sin atmósfera oscura clara, más allá de la garganta profunda deDiamanda Galás, dedicándose en exclusiva a la intimidad en la penumbra, de su voz a piano. Recomendable para el inicio de una misa orgiástica en Texas o como acompañamiento de una oscura cena burguesa, con condes de Lautramont y condesas bathory del Nuevo Continente.