El nuevoJames Bond, en "The Jacket", encarna el papel de un enfermo mental recluÃdo en un psiquiátrico al que va a parar Jack Starks, un veterano de la Guerra del Golfo que tras recibir un balazo en la cabeza sufre amnesia temporal. Una vez de vuelta en los Estados Unidos es acusado de un asesinato y condenado a ingresar en el citado hospital, en el que el doctorBecker experimenta un tratamiento bastante peculiar, con resultados inesperados. Este es el punto de partida de la pelÃcula, una historia que desde el principio pretende cuestionar los lÃmites entre la vida y la muerte, entre la realidad de lo consciente y el poder del subconsciente.
Ese es uno de los principales defectos, el que Maybury haya optado (o le haya sido impuesto, nunca se sabe) por mantenerse siempre a cubierto, sin llevar demasiado lejos la tesis propuesta, no vaya a ser que algún espectador tenga que pensar un poco, que llegar a cuestionarse si algo de lo que propone el film tiene visos de realidad. Y hablo de realidad entendida como desarrollo coherente de los postulados iniciales, no ya como realismo.
Nada nuevo, por otra parte, sólo otro caso de pelÃcula prometedora que acaba quedándose a medio camino. De todos modos, comparada con algunos de los recientes estrenos en el campo del terror y derivados, "The Jacket" resulta interesante. Totalmente fallida, pero interesante.