Siguiendo las bases establecidas con la revolucionaria Blair Witch Project, Jaume Balagueró y Paco Plaza crean esta espectacular película de terror, grabada cámara en mano, tratando de imitar un suceso real.
"Rec" dirigida por Jaume Balagueró & Paco Plaza con la distribución de Filmax y presentada Noviembre de 2007. Interpretada por Manuela Velasco como Ángela & Ferran Terraza como Manu & Jorge Serrano como Sergio & Pablo Rosso como Marcos & David Vert como Álex & Claudia Font como Jennifer desde España y pertenece al género Terror , tiene una duración de 85,00 minutos. Enlaces Relacionados:REC & Filmax Valoración: 8.75 sobre 10
Dos de los directores nacionales, de mente más abierta y arriesgada, se unen para dar vida a esta producción que ha revolucionado el panorama del cine de terror. Muchos lo intentaron con anterioridad pero pocos lo consiguieron. En la actualidad, con los enormes PCs que pueden generar casi de todo (monstruos increíbles, ambientes fantásticos, sonidos de infarto) y el gran despliegue de medios técnicos y económicos, resulta difícil crear una película que asuste realmente al espectador más exigente. Está claro que el cine de terror ya no es lo que era. Ha perdido gran parte de su valor, el poder de asustarnos, de salir de las salas de cine y tener en mente la película durante varios días. Estamos curados de espanto y, por mucha imaginación y guiones fuertes, realmente hemos visto de todo, y poco puede ya sorprendernos. Sustos que te hagan saltar de la butaca son fáciles de conseguir y son efectivos, pero yo me estoy refiriendo a visionar y sentir terror, miedo.... meterte en las carnes de los protagonistas y sentir lo que ellos sienten… una película de terror no debería de medirse exclusivamente por los sustos que te puedan dar... me refiero a ver una escena que te ponga los pelos como escarpias, crear una tensión que te incomode, que te ponga de los nervios, que te haga tener que retirar los ojos de la pantalla. Esto, todo esto, es mas difícil de conseguir. Los directores y guionistas son conscientes de esto, y llevan un tiempo buscando nuevas fórmulas para asustar. ¿Qué nos suele dar realmente miedo?, la realidad… y como es bien sabido, ésta es a veces mucho más dura que la ficción. De esta manera, hemos podido ver últimamente algunos títulos que basan sus historias en sucesos reales, cuanto más escatológicos mejor, o sucesos que perfectamente podrían ser reales y que a cualquiera, en circunstancias cotidianas, podrían arruinarnos la vida (por ejemplo, películas como Hostel). Pero, aun así, el espectador necesita una vuelta de tuerca más, y quizá sea [REC] el producto que está esperando.
La novedad que presenta [REC] no es, a priori, una fórmula original, porque yo creo que todos recordamos rápidamente otra película en la misma onda, El Proyecto de la Bruja de Blair. En esencia, ambas películas tratan de hurgar de la misma forma en nuestro subconsciente. El Proyecto de la Bruja de Blair fue la que escribió las pautas, y [REC] las estableció y fortaleció. En El Proyecto de la Bruja de Blair jugo un papel importante el marketing que recibió la película a través de Internet, haciéndonos pensar, sobre todo, en un principio y a las primeras personas que la vieron, que esa cinta fue el resultado de tres personas que se perdieron en el bosque y lo único que encontraron fue su testimonio grabado en video. Mucha gente se aterrorizo, y realmente la mala calidad de las imágenes, todo tan real, tan “cutre”, fue un factor determinante para que ver aquella película resultase una experiencia distinta. Aun así, alguna gente criticó un aspecto que restaba un poco de realismo a la historia, y era que alguien en una situación tan crítica o terrorífica, lo que menos haría sería estar grabando constantemente lo que está ocurriendo. En [REC] todo esto se solventa, en parte, de una manera muy imaginativa. Se buscan pretextos para que el espectador no pierda en ningún momento el hilo de conexión con la realidad. Además, lejos de ser una película sencilla, sin efectos especiales, o de maquillaje, todas las escenas están perfectamente grabadas y se ven cosas que yo no esperaba.
La trama en sí es ese puente de conexión que busca asustar al espectador, haciéndole creer que todo lo que se ve es real, creando una película en la que lo que vemos es producto directo de lo que el cámara de un programa de televisión y su reportera graban casualmente en una noche en la que acompañan a una dotación de bomberos en su quehacer habitual, en la ciudad de Barcelona. De esta manera se justifica la grabación de una película con cámara en mano, con secuencias grabadas sin cortes y con la tensión e interpretación lo más cercanas a una situación real. El cámara está allí y graba todo lo que sucede. Comienzan la noche con entrevistas y visitando las distintas dependencias de la estación de bomberos. En cierto momento la alarma suena, y Ángela y su cámara se van con los bomberos para asistir a una actuación real. Según parece, una mujer mayor de un edificio comenzó a volverse loca, gritando y alertando al resto de vecinos quienes avisaron a la policía. La mujer se encontraba encerrada en su casa, y los bomberos fueron para derribar la puerta. Al entrar, se encontraron una mujer de aspecto destartalado y repleta de sangre en un piso completamente vacío. Todo parece transcurrir con cierta normalidad hasta que la anciana ataca a un policía violentamente, mordiéndole en la cara y arrancándole casi la mitad de la misma. Desde ese mismo momento, comienza la locura. Cuando intentan salir del edificio no pueden hacerlo porque las autoridades sanitarias lo han precintado por la posible amenaza de un extraño virus. En el interior quedan algunos vecinos, Ángela, el cámara, los bomberos y los policías... y algo más.
[REC] es una película, ya de por sí, interesantísima, por lo revolucionario de su trama y, más aún, siendo española, tanto que Hollywood ya ha comprado los derechos de la cinta e incluso ya han empezado la grabación. Todo en [REC] busca la complicidad con el espectador haciéndole creer que se trata de escenas reales, de tal manera, hay un gran trabajo del equipo técnico, de producción, de fotografía y artístico, que emprenden perfectamente sus tareas. Por ejemplo, cabe destacar la excelente actuación de todos los actores (a excepción de un par de ellos, como el policía mayor y la china, que no convencen nada) empezando por Manuela Velasco, que interpreta a Ángela y que, sobre todo, al final realiza un papelazo, y terminando por la niña Claudia Font, que tiene un par de secuencias sobrecogedoras. Me gustó mucho la manera de justificar la constante grabación de lo que sucedía. Al principio graban un poco por el morbo de las imágenes (corazón de paparazzi), luego grababan para tener una prueba que atestiguara lo que estaba ocurriendo, y cómo las autoridades les había encerrado en un edificio, sin salida, con gente herida, sin darles ninguna explicación. Llegando al final, la luz se les apaga y graban usando la antorcha de la cámara y, finalmente, para poder usar la visión nocturna. En toda la cinta está justificada la grabación, aunque, obviamente, también existen cortes, e incluso también a veces, el cámara, se ve cómo deja la cámara en el suelo para ayudar a otra persona etc.
La tensión en la película apenas te deja respirar, aunque es cierto que quizá esperaba un poco más en este sentido. Si has visto el trailer, más o menos te puedes hacer una idea de lo que verás, porque prácticamente todo se puede resumir en esas imágenes. He oído algún comentario que decía que, pasados 10 minutos del comienzo, todo eran sustos tras sustos y esto no es completamente cierto. Entre medias, también hay bastantes secuencias de calma, sobre todo, mientras que Ángela realiza algunas entrevistas. Para mí, lo mejor, en cuanto a tensión y atmósfera, son los últimos diez minutos de la película, rodada entre la incógnita, el terror de la oscuridad absoluta, guiándose únicamente de un pequeño visor de imagen nocturna (increíbles!!). También es importante de resaltar que parte de la explicación de la película la dejan un poco a tu interpretación, más que nada porque recordemos que no se trata de una película normal, sino de una cadena de sucesos con un desenlace, imitando una realidad (realidad ficticia), con lo cual no tenemos por qué saber todo lo que está ocurriendo, no tenemos por qué comprender nada más que aquello que los propios protagonistas están viviendo y descubriendo. Todo esto se ve reforzado con la ausencia de banda sonora, que lejos de ser algo negativo, contribuye a generar aún más tensión, rozando la realidad. Tan sólo algunos sonidos graves, largos y densos muy ambientales y tétricos.
Dato importante y, para mí, curioso es la doble dirección de la película (no recuerdo, ahora mismo, otra película cuya dirección sea compartida). Jaume Balagueró (personalmente, mi director preferido, después de Alejandro Amenábar), un personaje con una larga lista de éxitos a sus espaldas y, lo que más me gusta, siempre dentro del genero de terror, apostando por películas arriesgadas y poco habituales para el cine español, como Frágiles, Darkness, y Los Sin Nombre. Respecto a Paco Plaza, su nombre no me decía mucho, pero sí sus películas, véase Romasanta y El Segundo Nombre.
Y poco más que decir, sólo que ésta es una de esas películas altamente recomendadas, sobre todo, para visionar en la gran pantalla y aprovechar plenamente los beneficios de este medio.
