Un año más, y van cuatro, Madrid se viste de gala para recibir a sus marcianos favoritos, esos que vienen del planeta Sci-Fi en un gran platillo, reparten chocolatinas y en cada nueva edición consiguen abducir mayor cantidad de público con sus proyecciones hipnóticas.
Princess es el nombre artÃstico de Cristina, actriz porno que muere de sobredosis dejando una hija pequeña de 5 años de edad. Tras su muerte, su tÃo August decide hacerse cargo de su sobrina Mia dejando atrás su profesión de sacerdote misionero.
Sin embargo bordea temas controvertidos, el personaje de August es sin duda el punto fuerte "existencialista" de la historia con su sentimiento de culpabilidad, su determinación y esa cruzada que le hace a veces volver la vista al cielo preguntando a su Dios si es el camino correcto. Mia, su sobrina, sale de un mundo terrible para acompañarle en una espiral creciente de violencia y venganza que tampoco es muy propia de una niña. PornografÃa frente a religión, argumentos enfrentados. Abuso infantil y violencia justificada, terreno pantanoso en el campo de la moral. En Estados Unidos serÃa calificada para mayores de 90, o algo asÃ.
Encontramos reminiscencias por aquello del móvil a "Llamada Perdida" (2003) y "Pesadilla En Elm Street" (1984) ya que conviene no dormirse. La crÃtica lo ha calificado en general como un film oscuro y triste, pero tiene otra caracterÃstica peor, es aburrido, la interpretaciones de tan puro inexpresivas (rasgo que por otro lado suelen tener estas pelÃculas) llegan a causar risa.
Los datos por los que los detectives llegan a la conclusión de esta muerte en sueños son precipitados e inconexos y a medida que la narración avanza la lentitud crece y para colmo empiezan a surgirnos preguntas del tipo: "¿pero de dónde a salido el arma, si no tenÃa nada en las manos?".
Supuestamente, Tsukamoto ha intentado hacer un producto más comercial que le acercara al público general, pero estoy deseando que vuelva a hacer cualquier cosa sin esta prerrogativa, algo más ciberpunk cómo sólo el sabe hacer quizá, aunque de todas formas al que he llegado a oir llamar el David Lynch asiático, no es un director para todos los públicos.
Tras estos personajes, podemos escuchar las voces en versión original de Daniel Craig, Catherine McCormack, Ian Holm y Jonathan Pryce. Este estupendo trabajo es otro de los visionados imprescindibles de la muestra.
A los aficionados al cine de Hong Kong les sonará la cara de algunos actores, y están en lo cierto pues los hay muy conocidos. Todos comparten un grado más o menos similar de protagonismo, pero entre ellos destaca Blaze, el encargado directo de asesinar a Wo, interpretado por el actor Anthony Wong, uno de los actores más reputados del paÃs asiático y que cuenta en su haber con varios premios en los Hong Kong Film Awards. Se dio a conocer internacionalmente por su papel de Inspector Wong en "Infernal Affairs" (2002). PelÃcula que por cierto sirvió de antecedente a Martin Scorsese para dirigir recientemente su remake "Infiltrados" (2006) y con la que conseguirÃa 4 Oscars. Actualmente le podemos ver en cartelera compartiendo protagonismo con Edward Norton y Naomi Watts en "El Velo Pintado" (2006). A Lam Suet (Fat), que aporta la parte simpática, le vimos en la hilarante "Kung Fu Hustle" (2004).
A destacar la maravillosa banda sonora que supone un alto tanto por ciento de la ambientación y unos diálogos y situaciones entre los personajes que no tienen desperdicio.