El mar, esa inmensa masa de agua que nos rodea por todas partes, siempre ha proporcionado material para la literatura fantástica. He aquí una muestra.
"Mares Tenebrosos" escrito por Varios autores en la editorial de Valdemar (ISBN: 978-84-7702-693-8) con 624 páginas. Desde Estados Unidos & Gran Bretaña & España & Francia y presentado en Mayo de 2011 se encuadra en el género Terror Enlace Relacionado:Valdemar Valoración: 8 sobre 10
El mar, ese vasto elemento que ocupa la mayor parte de la superficie de nuestro planeta, ha sido siempre objeto por parte de los seres humanos de las más tremendas fabulaciones en respuesta y consuelo a las angustias provocadas por lo imposible que nos resulta conocer bien algo de tan tremenda magnitud. Desde siempre la imaginación de los escritores se ha desbocado a la hora de hablar del mar, fuente de toda clase de peligros y madre de todo tipo de horrores que tratan de conjurar el miedo que los humanos le han tenido siempre a algo que nunca podrán controlar a su gusto.
El miedo a lo desconocido ha excitado el talento de numerosos autores a la hora de describirnos que espantos se esconden bajo las aguas de los diversos mares y océanos que circundan nuestros territorios. El desconocimiento y el ya mencionado miedo sirven como excusa para poner en pie relatos sobre islas fantásticas, pobladas por vegetales de tamaño inaudito y de hermosura letal; relatos sobre amenazas que vienen desde más allá de la línea del horizonte; relatos sobre extrañas naves que surcan las más recónditas aguas con propósitos no muy claros pero sí muy negros… en fín, todo esto y mucho más es lo que se recoge en los relatos contenidos en esta antología.
“Mares tenebrosos”, editada en la colección Diógenes de la editoral Valdemar con el número 297 ( en tapa dura, algo muy poco frecuente en esta colección ) es la reedición en bolsillo de la misma antología ya publicada hace unos años en la lujosa colección Gótica de la misma editorial, con el número 53. Nada hay de novedoso en esta reedición, por lo que si ya tenías la versión de la colección Gótica no te molestes en adquirir esta otra. Si por el contrario no la tenías, no dudes en comprarte la edición en términos náuticos y con una serie de diagramas de barcos, además de con presentaciones e ilustraciones al comienzo de cada relato.
Uno de los grandes méritos de este libro es el de contar con el concurso de numerosos autores muy poco conocidos entre nosotros, lo que aporta un plus de interés al que ya de por sí puedan ofrecer las historias de autores consagrados como William Hope Hodgson, Robert E. Howard o el mismísimo Vicente Blasco Ibáñez, sí, el autor de “Cañas y barro”, alguien a quien nunca esperaríamos ver incluido en una antología de cuentos de terror. De hecho, su relato, “Hombre al agua”, no es exactamente una historia de miedo, pero sí que es uno de los más angustiosos del volumen, perfecto a la hora de retratar la angustia y la agonía de un joven marinero que ha caído al agua desde su barco y cuyos compañeros se marchan sin rescatarle.
Otro relato que me ha parecido brillante ha sido “El misterio del Vislatek”, de Óscar Sacristán, autor además de la portada y de las ilustraciones interiores del libro. Este extenso cuento recuerda a los sucesos relatados en el diario del capitán del Demeter, el barco que en la novela de Bram Stoker lleva a Drácula hasta las costas de Gran Bretaña, para luego pasar a relatar una historia con toques a lo Agatha Christie, en la que los miembros de la tripulación del Vislatek van muriendo uno tras otro de forma misteriosa. Por su parte, “La llave de los tres esqueletos”, de George G. Teudouze, narra la lucha de tres personas atrapadas en un faro en mitad del mar contra una plaga de voraces, despiadadas y gigantescas ratas con mucha, mucha hambre. La imposibilidad de la huida, lo virulento y brutal de la amenaza y lo bien retratada que queda la angustiosa situación hacen de este relato uno de los más destacados de los aquí presentes.
Otras historias, como “El pecio de la muerte”, de Simon Clark y John B. Ford, “Al otro lado de la montaña”, de Michel Bernanos, o “Una voz en la noche”, de William Hope Hodgson, por mencionar sólo unas cuantas, hacen junto con las que he recordado anteriormente que esta recopilación de historias de terror sobre el mar sea una lectura ideal para pasar un buen mal rato, que es de lo que se trata y lo que se busca cuando nos acercamos a los libros de este género.
El mar, ese vasto elemento que ocupa la mayor parte de la superficie de nuestro planeta, ha sido siempre objeto por parte de los seres humanos de las más tremendas fabulaciones en respuesta y consuelo a las angustias provocadas por lo imposible que nos resulta conocer bien algo de tan tremenda magnitud. Desde siempre la imaginación de los escritores se ha desbocado a la hora de hablar del mar, fuente de toda clase de peligros y madre de todo tipo de horrores que tratan de conjurar el miedo que los humanos le han tenido siempre a algo que nunca podrán controlar a su gusto.
Uno de los grandes méritos de este libro es el de contar con el concurso de numerosos autores muy poco conocidos entre nosotros, lo que aporta un plus de interés al que ya de por sí puedan ofrecer las historias de autores consagrados como 