La literatura de terror en España sufrió un declive en los años noventa, con la desaparición de las colecciones especializadas, como las que llevaba Martínez Roca, y el desinterés progresivo que los lectores mostraban hacia las antologías de relatos. Este hecho conllevó que los pocos autores españoles que cultivaban el género no encontraran facilidades para colocar sus obras, algo que en los últimos años, de mano de grandes autores (Somoza, Pedraza, Barceló) que se han acercado al género y de colecciones especializadas, como la que presenta la editorial Equipo Sirius, parece haberse remediado.
"La Silla" es la primera novela publicada por David Jasso, un autor que se ha dado a conocer con varios relatos aparecidos, por ejemplo, en antologías como "Paura", y con su presencia en la red como escritor y narrador de microrrelatos de terror en Divergencia Cero. David Jasso cultiva el género con ritmo cinematográfico (no en vano trabaja en una videoproductora), y muestra además cierta atracción por los detalles desagradables, lo que permite al lector adentrarse con facilidad en la trama y detenerse a disfrutar de los momentos más intensos.
En "La Silla" narra la historia de Daniel Lonces, un escritor de obras de terror (tema recurrente en muchos autores del género, como Stephen King), que va un paso más allá en la recreación de un escenario para su último libro. David Jasso orquesta esta historia intimista alrededor de este personaje y la silla a la que se encuentra atado, llevando al lector a una incómoda situación que, tras un primera sensación de situación absurda, se antoja irresoluble e insoportable según avanza la narración. Lo que parece una anécdota se transforma en un tour de force que no permite un instante de respiro, y gracias al sentido del ritmo del autor el lector no abandona en ningún momento la sensación opresiva que trasnsmite.
Escrita con un estilo directo, crudo en ocasiones, sólo pierde fuerza en momentos ocasionales, que remonta con habilidad en un excelente final. Como pega más evidente, el prólogo y el epílogo se antojan superfluos, aunque abren el camino a una posible secuela.
La edición de Equipo Sirius es excelente, añadiendo a la narración las magníficas ilustraciones de Manuel Calderón y una página web dedicada a la novela y al autor, con multitud de peuqeños detalles que nos presentan nuevas cosas sobre ambos, así como un relato inédito del autor.
En definitiva, una obra recomendable, redonda, que nos presenta una historia que puede parecernos conocida pero que está tratada de una manera original hasta un final (sí, un final, me repito) de los que se quedan grabados en la memoria.