El autor de "Cuentos de Hadas para no Dormir", que se presentó en el Bar Cría Cuervos de la Ciudad de México el año pasado y que en este 2010 ha repetido la experiencia en la Feria del libro de Minería, el Paseo de los Libros en Reforma y el 10 Festival Equinoccio de Tulancingo, Hidalgo. También es colaborador de las revistas "Gótica", "Marvin", "Indie Rocks!" y "Nocturna"
Ser Rockstar sin ser músico.
"Siempre se me ha hecho que la figura del Rockstar no precisamente tiene que ser músico, porque serlo va mucho más allá…"
Arturo define su literatura como “muy de rock”, como el Heavy Metal: estridente y agresiva. Arturo es un rockero, es un frontman, tiene fans y grupis (o al menos las podría conseguir) y sabe más de música que muchos de nosotros. Arturo es el Rockstar que no es músico.
Comenta:“Presenté mi libro en Minería y parecía concierto. Después de convivir con tanto Rockstar se te pega y también quieres. Se siente bonito generar un lector o alguien interesado en mi trabajo. Que mi libro se presentara en el Cría Cuervos, que es fascinante porque de día es una taquería y de noche alberga punks, darks y tocadas, fue ‘wow’. Que llegaran unos punks con su cresta y me dijeran ‘Tu libro me fascinó. No lo pude dejar de leer…’, me hizo darme cuenta de que ese es el público al que le quiero llegar.”
Los inicios
Arturo recuerda cómo en la preparatoria empezó a escribir en una revista literaria y después su gusto por bandas como Guns n’ Roses, Nirvana y Caifanes y por leer revistas de rock lo llevaron a empezar a entrevistar a bandas entre 1997 y 1998.
Rockotitlán fue un punto clave en su carrera. “Recuerdo que podía pagar un cóver cada semana o cada dos semanas para ir a Rockotitlán, ahí vi por primera vez a bandas como Las Víctimas, Molotov, Tijuana No y La Lupita. Molotov fue una banda que me encantó porque jamás había escuchado tantas groserías juntas y además unos músicos tan versátiles: el bajo de repente se pasaba a la batería y el bataco de repente se ponía a cantar y cosas así. La primera banda que entrevisté para la revista de la prepa fueron ellos, Tito y Mickey y fue en un Vips” Afirma el autor.
La doble vida.
“El ser manager de Mystica Girls me ha influenciado mucho porque no sabía cómo se hacían las cosas por detrás…”
“… ahora cuando voy a un concierto y se retrasa media hora ya no miento madres a lo pendejo. Ya me imagino que hay un wey detrás tratando de resolver un problema. Ahora me queda muy claro que cuando algo se retrasa no es un capricho.” Expresa Flores.
La convivencia que ha tenido con músicos ha sido como espectador, manager y vocalista en una banda, Utopía. “El convivir con músicos te humaniza. Entiendes que ellos también son novios, novias, hijos, hijas, hermanos, hermanas y también tienen broncas, no se la pasan en un escenario tocando.” Comenta Arturo.
¿Qué tan autobiográfico es tu libro?
“Alguien, no recuerdo quién, dijo que la mitad de lo que la gente escribe la vive y la otra mitad la imagina.”
“Alguien me dijo: ’Lo cuentas de una manera que parece que me estoy tomando un café contigo y me lo estás platicando’. Esas cosas no me pasaron. Me pasan cosas parecidas pero yo las exagero, le subo, le bajo, le muevo, y así sale el cuento. Es empezar a recoger conchitas en el mar y te queda un armatoste y eso es lo que entregas.”. Y esta vez Arturo recordó quién dijo que “La vida no tiene por qué ser interesante, pero la Literatura sí.”, fue Borges y confesó que ante esto, él cuenta, no lo que le pasó, sino lo que le gustaría que pasara.
Yo, personalmente, conocí el trabajo de Arturo desde que mandaba sus textos a la "Cuaderna Vía"de la Revista "Gótica" y después de algunos años me hallo sentada frente a él haciéndole preguntas. Es muy obvio que de la "Cuaderna Vía" a la fecha ha evolucionado bastante y le pedí que hablara al respecto.
¿Qué tanto has evolucionado desde que escribías en la "Cuaderna Vía" a la fecha?
“El público siempre te va a decir que esta muy bien o muy mal. El fan te va a decir que es lo mejor que ha visto en su vida y el detractor te va a decir que es lo peor…”
Parte de la diversión de conocer a Arturo es asistir al taller que imparte de Periodismo de Rock. “Yo nunca dejo de estar en talleres. Ahorita imparto uno, pero no dejo de asistir a los míos de "Expresión Literaria." Un taller es como una banda. Al músico solista de repente le hace falta la réplica. Cuando estas en una banda de repente te clavas y piensas que estas haciendo un solo de guitarra excepcional, pero luego tus compañeros te dicen que te falta feeling o te estas volando muy alto. Cuando ‘tallereo’ mis textos de repente yo llevo lo que creo que es EL cuento y le va de la chingada, porque aparte los que lo critican saben de lo que hablan. Pero también me han tocado elogios y se siente muy padre, creo que sí he crecido.” Argumenta Flores.
El escritor y sus influencias. Bradbury, Stephen Kingy José Agustín son algunas para él. Y al mencionar a éste último, recordé "La Contracultura en México" y me pareció interesante saber cómo se veía Arturo a sí mismo y su trabajo dentro de la Contracultura en México.
Cultura, contracultura o campechano.
“El verdadero underground de ahorita está entre la Literatura y en Performance…”
“Más que Contracultura, yo le llamo ‘Cultura Periférica’, como me enseñó a llamarles mi maestro Pascal, ya que se desarrollan en la periferia de la cultura central y las culturas periféricas están aprovechando los espacios que abre la cultura central.
Presentar mi libro en la Feria del Libro Reformajunto a un concierto de metal de Mystica Girls se me hace una expresión underground” Comenta Arturo.
El Rockstar y sus Fans.
“Hace años escribí un artículo en la revista "Rock Stage" donde comparé a Helloween con el chicharrón en salsa verde de mi abuela y por ese artículo conocí a Zombie, a ella le gustó mucho ése artículo y no lo olvida. Se decidió a estudiar Comunicación a partir de que conoció mi trabajo. La conocí en persona en el Live N’ Louder II, vino desde Tulancingo y nos presentó el Chico Migraña. Ella estaba muy nerviosa y yo sentí que a mis entonces 25 o 26 años no había hecho tantas cosas en la vida como para que alguien se sintiera honrado de conocerme.” Relata el autor.
Las extravagancias de los Rockstars
“El fenómeno del Rockstar, conocerlo detrás de su imagen pública, siempre me ha gustado mucho. Conocer a los protagonistas de la música que me gusta y sus extravagancias.”
“Un día le propuse al Chico Migraña escribir un libro con todas las anécdotas , pero hasta ahora se han quedado en borracheras.” Comenta el autor
Arturo recuerda:“Una vez anduve de traductor con Stoa y el promotor que los traía y fuimos a Pericoapa. El vocalista se compró tres pantalones Levi’s negros 501 modelo 55. Y digo, los góticos y los metaleros mexicanos son tan ortodoxos que están en contra de las corporaciones, y llega Stoa, una banda fundamental del Gótico y se compra pantalones Levi’s… Ese tipo de ironías son cagadas. Aparte el tipo aprendió luego luego a regatear y andaba regateando su iPod…”.
“Otra vez, con Christian Death en una borrachera, la vocalista le estaba tirando la onda gruesísimo a mi novia. Escribí una crónica al respecto que se llama ‘Ponle tus sucias manos encima a mi novia’, porque en vez de darme coraje, me prendió el rollo de ver a Maitri casi fajándose a mi novia.” Relata Flores.
"Una manera inteligente de faltarle al respeto a alguien.”
“Yo me acuerdo de mí a los 19 años yendo en pesero, cargando mi mochila y trayendo un libro en ella, cagado de risa leyendo a José Agustín o a Armando Vega Gil y eso es lo que quiero, así es como quiero ver mi libro.”
“Si llega un albañil y me dice ‘No mames wey, tu libro esta de huevos’, yo lo valoraría más que si llega Enrique Krauze y me dijera ‘Jóven Flores, su libro es una pieza fundamental de la literatura contemporánea’. Yo no escribo para ellos.”
El Rockstar Arturo aspira a que alguien lo lea y diga “Es Arturo”, así como Pearl Jamaspiró alguna vez a que alguien los escuchara y dijera “Son Pearl Jam”. “Una vez Jaime López me dijo que la entrevista que le hice para la Revista "Lengua" era ‘una manera inteligente de faltarle el respeto a alguien".
La filosofía de Arturo es como la de Opeth. No les importa la piratería. Es más, está a favor de la piratería con tal de ser escuchados, o, en el caso de Arturo, leído. “Hay colegas que son muy celosos del copyright. Yo no, no tengo ningún pedo si alguien sube el PDF de mi libro a Internet o para un free-downloading. Me vale madre, yo lo que quiero es que me lean.”
“Ah, cómo hablo, ¿verdad?.”
Nos despedimos después de no sé cuánto tiempo de entrevista, que más que una entrevista a un Rockstar, se sintió como una plática cualquiera con un amigo, con un manager, con un maestro, un colega. Y Arturo se fue, como Celtic Frost en los tacos de la esquina, incógnito y desapercibido.
