Fundamentado sobre todo en la figura de Edgar Allan Poe y a menudo confundido con el concepto de “narrativa gótica”, el tardío movimiento romántico en la literatura estadounidense del S.XIX engloba muchos otros matices y aspectos característicos y propios así como otros autores no menos relevantes que sentaron las bases de su literatura patria en aquella nueva sociedad en construcción.
La segunda generación de románticos
Los escritores que sucedieron a los pioneros Irving y Cooper gozaron gracias a estos de una mayor comodidad a la hora de escribir y se puede decir que son éstos los que siguiendo el camino iniciado por sus predecesores desarrollaron y fijaron definitivamente las características de la literatura de su país. La época de las grandes expansiones va finalizando a lo largo del S.XIX por lo tanto la idea de nación está ya asentada aunque aún quedaría por venir la guerra civil. En este contexto tiene lugar la eclosión de la literatura norteamericana que a partir de entonces no dejará de crecer y crecer al tiempo que se irá extendiendo por todo el mundo junto con su cultura y hegemonía como potencia económica y política.
En esta nueva generación es clave la figura del escritor y filósofo norteamericano Ralph Waldo Emerson(1803-1882), creador del movimiento filosófico, religioso y literario conocido con el nombre de Trascendentalismo. Influido por la filosofía racionalista y romántica alemana así como por el Hinduismo, conocimientos adquiridos a través de sus viajes por Europa, Emerson apostaba por una especie de religión individual basada en la conciencia individual del individuo de modo que el alma de cada individuo contiene parte del mundo al que pertenece y es a su vez parte de él. Estos conceptos verán la luz en 1836 cuando publica de forma anónima su primer libro, "Nature". Más tarde, trasladará esos ideales a la literatura con la idea de recoger los valores que debería tener, a su modo de ver, el escritor americano en su discurso titulado "El estudiante americano", en el que proclama la independencia literaria de los Estados Unidos y apuesta por la liberación del estilo europeo creando un estilo propio. Este y otros discursos y ensayos serían recogidos y publicados en 1841 bajo el título de Ensayos.
La influencia de Emerson tuvo una gran repercusión en la obra de otros dos importantes escritores estadounidenses: Walt Whitman(1819-1882), autor de "Leaves of Grass"(1855) y H.D. Thoreau(1817-1862) famoso por "Walden" (1854) y su tratado sobre la desobediencia civil, "On Civil Disobedience"(1849). Walt Whitmanes conocido por su poesía; "Leaves of Grass"es un canto a la celebración de la vida y el goce de los placeres que nos ofrece la naturaleza. Los versos recrean escenas bucólicas y se deja entrever una gran carga sexual en muchos de sus poemas. Sin embargo su influencia va a ser esencial en la poesía modernista norteamericanadel S.XX. Thoreau por su parte, naturista y anarquista declarado, defendió el derecho del hombre a vivir en libertad y por ello se retiró a los bosques a vivir en armonía con la naturaleza. Después recogió sus experiencias y las publicó bajo el título de "Walden". El resto de su vida lo dedicó a reivindicar el derecho del ser humano a vivir en libertad y se declaró en lucha contra el Estado por lo que fue encarcelado en alguna ocasión.
Sin embargo para Nathaniel Hawthorne (1804-1864) la influencia de Emerson y su trascendentalismo tuvo un efecto menor. A pesar de estar casado con una pintora trascendentalista y de tener como vecinos al propio Emerson y a Thoreaucuando la pareja se trasladó a Massachussetts a él le interesaba más el terror y la intriga. Sus novelas se caracterizan por la atmósfera oscura y la sensación de opresión que transmiten los entornos que recrea en ellas, como en la letra escarlata, "The Scarlet Letter"(1850). Hawthorne es el escritor de los contrastes, de las fuerzas opuestas, y en sus novelas se apoya frecuentemente en conceptos antagónicos que se contraponen: lo convencional frente a lo atípico; la hipocresía frente a la franqueza; la culpabilidad frente a la inocencia; el progreso frente a la nostalgia por el pasado. Aunque muy cercanas a la novela góticapor su imaginería, en sus cuatro novelas ("The Scarlett Letter", 1850, "The House of the Seven Gables", 1851, "The Blithedale Romance", 1852 y "The Marble Faun", 1960) Hawthorne despliega unos personajes trabajados, ricos en matices, que nada tienen que ver con los a menudo insípidos y llanos personajes del relato gótico; estos reflexionan acerca de complejos asuntos morales y/o existenciales en busca de una verdad absoluta inalcanzable para ellos y que les arrastra a su propio martirio y aislamiento en una sociedad reaccionaria y hostil a la cual no logran entender: la puritana. Muy influido por su herencia puritana Hawthorne retrata esta férrea sociedad conservadora y religiosa (localizada sobre todo en la región de Nueva Inglaterra, de la que era natural), como un ente compuesto por fanáticos de falsa moral cristiana donde todo lo que escapa a sus doctrinas debe ser aniquilado. Como los hijos de David en el Antiguo Testamento, los pioneros puritanos se consideraban los predilectos de Dios al haber sido elegidos para poblar el nuevo mundo; huían de una Europa mayoritariamente católica donde sus creencias eran castigadas con la muerte y ahora que habían encontrado al fin un lugar donde desarrollar su vida y su credo libremente no iban a permitir que influencias externas amenazasen su estabilidad. Aunque pensaron que la amenaza vendría de fuera lo cierto es que pronto empezaron a acusarse unos a otros y con ellos las “cazas de brujas”, siendo uno de los casos más famosos el de las brujas de Salem que mucho más tarde retrataría el dramaturgo Arthur Miller a mediados del S.XX. Así pues, en esta sociedad temerosa de un Dios colérico e inclemente donde pesaba más el significado del pecado que el hecho en sí de pecar, desarrolló Hawthorne su obra, trabajando bajo aquellos mismos temores, sólo que en su caso chocaban también con los conocimientos filosóficos de sus colegas trascendentalistas. Quizás de ahí venga esa constate lucha entre ideas contrapuestas que se aprecia en su obra, también en sus cuentos; cabe destacar entre ellos "Rappaccini’s Daughter" ("La hija de Rappaccini", 1844), "The Birth-Mark" ("La marca de nacimiento", 1843) y "The Artist of the Beautiful"("El artista de lo hermoso", 1844).